Políticos hipócritas conmemoran el 11-S

 

foto Reuters

¡10 años después, estamos en las mismas! Por un lado las conmemoraciones, que llenan todas las primeras páginas, y por otro las contestaciones y la búsqueda de la verdad, visibles en publicaciones especiales que se pueden encontrar sólo si se buscan espontáneamente, o también, a veces, en programas aislados que la mismas emisoras pasan en momentos diferentes, aunque repitan como noticia destacada, en esta fecha, la versión oficial que el gobierno de EE.UU. propone. Obama y Bush no corren ningún riesgo de tener que responder a preguntas incómodas, los periodistas que se les acercan hoy son todos homologados. En el medio se encuentran los televidentes: entre ellos hay muchas personas que demuestran identificarse más con las víctimas estadounidenses que con las de otras etnias, dando espacio a esta recurrencia, ya tan mediática, más que a otras y haciendo el juego de los que manipulan la información, juego que no les conviene en absoluto tampoco a los seres queridos de las víctimas. Por supuesto habrán personas, por lo contrario, que desprecian EE.UU. por razones políticas o personales y ven mal la conmemoración, y también hay personas que no piensan mucho y simplemente se dejan llevar por los sentimientos que los periódicos quieren provocarles... y, en fin, hay otras personas que siguen buscando la verdad y que dan espacio en sus blogs o en las redes sociales al debate. 

Como quise hacer yo, hoy: 

La verdad sobre el 11-S no conviene al Gobierno de EE. UU.

Sería interesante considerar todas las opiniones de los expertos, que expresan ideas diferentes, y no  quedarse con la versión oficial. Hasta que hayan dudas, el gobierno de Estados Unidos no debería aprovechar de esta fecha para las clásicas conmemoraciones que utiliza para fines políticos, dando por sentada la teoría del atentado.